Llegamos a Cetina la mañana del 19 de mayo y nos encuentramos nada mas bajar del coche con tres o cuatro niños vestidos con trajes blancos con puntillas que me recuerdan irremediablemente a los infanticos del Pilar. Corriendo, comiendo chuches, escapándose de sus madres y ajenos sobre todo a la trascendencia y sentimientos que despierta el dance que en pocos minutos van a interpretar
Como siempre, cuento con Concha como jefa de protocolo habitual, pero que esta vez delega en su hija Vega, ya que ella se va de viaje. Vega, nos acompaña en el recorrido, nos indica las sillas de la plaza que su madre nos ha reservado y nos explica las curiosidades de la fase previa al dance en la plaza.
Hablo en plural, ya que en esta ocasión me acompaña la doctora Perales, (mi esposa, además) que es sobradamente conocida en estos lugares. Nada más bajar del coche, ya saluda a varios conocidos/pacientes. De todos ellos conozco personalmente a Luis Mendoza y Miguel Angel Morón, de la celebración de la Contradanza en el edificio Pignatelli en 2017. Hago una foto a Carmen y su nieto en la puerta de su casa, mientras devora en compañia de otro danzante unas rosquillas. Otra vecina, Mercedes consigue que entremos a su casa a probar el roscón bendecido. Acompaño el roscón con un poco de moscatel, para que pase. Al llegar Pedro, su marido, me ofrece una botella de licor de nueces ante la que no puedo negarme.
Si, esa botella que se tiene guardada para las ocasiones.
Espero que al autoenfoque de la cámara funcione bien... Fuera de la foto se encuentra Atocha, a quien no ha habido manera de convencer para que apareciera. En la parte inferior de la foto los vasos con licores que tuve que acabarme antes de salir de casa. Por si acaso no le hemos cogido el gusto, nos regalan un roscón para que nos lo comamos tranquilamente en casa.
En casa de Mercedes y Pedro hay una vara o cetro que en poco rato los danzantes vendrán a recoger.
Ya en la calle nos encontramos a la comitiva, formada por 8 danzantes (mayoría niñas) el mayoral y el zagal (las dos mujeres, y además hermanas). Dos clarinetes, un tamboril, las castañuelas de los danzantes y la gran castañuela del mayoral aportan el ritmo para los dances y bailes con los que los danzantes se dirigen a recoger las varas por distintas casas de la localidad.
En cada casa donde recogen la vara los danzantes y músicos son obsequiados con comida y bebida. El calor de la mañana ayuda a beber gran cantidad de agua.
Una foto con cuatro de las cinco varas que los danzantes tienen que recoger
Ahora si que consigo que Atocha salga en la foto |
La última vara que faltaba por recoger |
Una vez recogidas las varas, hay que ir a buscar al alcalde. En esta ocasión, como en otros años, el alcalde de Cetina está acompañado por el presidente de la Diputación Provincial de Zaragoza.
Parada y dance ante la ermita del patrón, San Juan Lorenzo.
Unos dances delante de la parroquial.
La Virgen de Atocha, bien pertechada de roscones
Imagen de San Juan Lorenzo
El obispo de Tarazona, D. Eusebio Hernández, con la reliquia del Santo.
Los danzantes no pierden de vista a San Juan Lorenzo, lo que les obliga a hacer gran parte del recorrido del espaldas. En las plazoletas, y por tres veces se para la procesión y se danza.
La procesión finaliza en la plaza de Cetina donde los danzantes, el mayoral y el zagal nos obsequiarán con una serie de bailes, paloteaos, dances de espadas y un dance que es un guiño al Contradance que unas horas más tarde se celebrará en este mismo lugar.
Me resultó curioso que los porteadores de las imagenes del Santo y de la Vigen de Atocha, llevasen el ritmo de la música, lo que ocasionaba un curioso bamboleo de las imágenes y los roscones.
El mayoral hace un elogio de la vida de San Juan Lorenzo y reclama una observancia de sus virtudes y vida ejemplar.
Por su parte, los danzantes, y con un sol de justicia, interpretarán distintos dances, bailes y paloteaos
Esta figura, en la que se sustituyen las antorchas por las espadas es muy similar a la mudanza "San Juan Lorenzo" que se representa por la noche, en la Contradanza.
Dance de espadas
Los danzantes narran diversos aspectos de la vida del Santo.
Con este saludo del mayoral finaliza el dance de este año. Ahora, danzantes, autoridades y público en general acuden a la iglesia parroquial de San Juan Bautista a celebrar la misa mayor en honor de San Juan Lorenzo. Como no todos van a caber en la iglesia, muchos otros irán a tomar el vermú en alguno de los bares del pueblo
Si alguien está interesado en profundizar sobre estas manifestaciones de religiosidad y cultura popular, existe variada literatura sobre el tema. Me atrevo a recomendar estas dos publicaciones:
- Bajén García, Luis Miguel. Rito y Misterio del Dance y la Contradanza de Cetina.Zaragoza, DPZ, 2011
- Ibañez Lacruz, Joaquin. Aproximación a la Contradanza de Cetina,. 2ª edicion Gobierno de Aragón, 2018
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